El racismo sigue siendo la primera causa de delitos de odio, tanto en Cataluña como en el estado. Aunque en los últimos años el número de delitos racistas denunciados se ha incrementado, todavía hoy entre el 80% y el 90% permanecen invisibles. Asimismo, en el ámbito institucional (político, policial , judicial, etc.) existe una falta de capacidad y voluntad para identificar las causas estructurales y las motivaciones racistas que están en la base de muchas de estas prácticas delictivas. Del mismo modo, las instituciones siguen siendo responsables del incumplimiento de los derechos de las «víctimas» de racismo –que a menudo terminan revictimizando– y de lafalta de mecanismos eficaces de reparación del daño.
Por otra parte la propagación y «normalización» creciente del discurso racista –en la política, medios de comunicación, redes sociales, etc.- es un indicador de cómo el racismo es un elemento clave de subordinación y discriminación, presente en todos los ámbitos de la sociedad. El odio racista no es casual ni ocasional: institucional, estructural y sistemático. Y en este sentido, el discurso racista y las prácticas y políticas institucionales van de la mano, se retroalimentan, siendo el primero al mismo tiempo causa y consecuencia de las segundas.
Ante esta realidad, los objetivos de SOS Racismo son:
- Ofrecer acompañamiento especializado a quien sufra odio racista mediante el SAiD
- Identificar nuevas acciones por la reparación del daño de las víctimas de racismo, e incidir con la administración por el reconocimiento efectivo de sus derechos.
- Generar y difundir narrativas transformadoras y alternativas al discurso de odio.
