SOS Racismo expresa su pesar ante la muerte, hasta este momento de 19 personas, 14 de las cuales son menores, tras el naufragio de una embarcación de unos siete metros que intentaba llegar a costas españolas con unas 28 personas a bordo, seis de cuales han podido ser rescatadas.
Esta es la imagen más dramática y la vulneración más flagrante de derechos humanos, en que se traduce la política migratoria europea que tiene como objetivo principal el blindaje de las fronteras europeas. A raíz de estas muertes, SOS Racismo vuelve a denunciar que:
- Centenares de personas pierden la vida cada año intentando llegar a costas españolas. Estas muertes que hoy lamentamos ponen de manifiesto el fracaso de la política migratoria europea y española, pero las preceden y por desgracia, las seguirán muchas más, centenares de las que tendremos conocimiento al cabo del año, y muchas de las que no sabremos nada.
- La ausencia de vías permanentes de entrada, eficaces y realistas, obligan a muchas personas, adultos pero también a menores, a jugarse la vida en sus proyectos migratorios. El viaje peligroso no es una alternativa más, en muchos casos es la única alternativa.
- El control represivo de los flujos migratorios en forma de externalización de fronteras y cuantiosas cifras invertidas en dispositivos de control de fronteras. Ambos son una muestra del cinismo de las políticas de inmigración y cooperación europeas, al mismo tiempo que siguen sin conseguir sus objetivos.
- No podemos normalizar el drama que viven tantas personas para llegar a las costas españolas, ni las muertes ni las desapariciones. Como tampoco podemos normalizar el hecho que muchas personas se vean obligadas a residir en la clandestinidad y por tanto a trabajar en condiciones de explotación o a ser víctimas de la exclusión social. Ser sensibles a esta realidad y exigir responsabilidades políticas es un primer paso para combatir estas vulneraciones de derechos humanos.
- Tampoco podemos cerrar los ojos a la realidad de continentes como el africano, de cuya situación es en gran parte Europa responsable. Como también lo es de la construcción de un modelo socioeconómico mundial que prima la desigualdad en pro del beneficio de una minoría.
Desde SOS Racismo denunciamos que existen responsables políticos de estas muertes evitables, que no son fruto de ninguna catástrofe natural, así que podríamos evitarlas, para ello exigimos un replanteamiento de la política migratoria en base al respeto de los derechos humanos, que tenga como prioridad el restablecimiento de vías legales y permanentes de entrada, así como el desarrollo de una política de cooperación responsable y efectiva.
16 de febrero del 2009
Federación de Asociaciones de SOS Racismo en el Estado Español